GAMER: Mafia III

 
   Un buen juego. Empieza bien, se estanca a la mitad y vuelve a repuntar al final.

   Nos metemos en la piel de Lincoln Clay, un militar que acaba de volver de la guerra de Vietnam a su ciudad natal: New Bordeaux. Nuestro protagonista pretende retomar su vida junto a sus amigos y su padre adoptivo, quien controla uno de los barrios de la ciudad para la mafia. Pero todo se tuerce, y tras unos acontecimientos iniciales, nuestro protagonista jura vengarse del líder de la mafia: Sal Marcano.

   Para llevar a cabo nuestra venganza tendremos que ir reconquistando cada barrio de la ciudad y tomando el control sobre los distintos negocios delictivos que tienen lugar en cada territorio. Para ello tendremos que ir saboteando cada negocio hasta que podamos matar al miembro de la mafia que lo dirige. Una vez controlado un barrio, lo dejamos a cargo de una de nuestras bandas amigas (Jamaicanos, Italianos o Irlandeses) a cambio de dinero, armas y favores.

   Los principales favores que vamos desbloqueando son: Un chofer que nos trae un coche nuevo donde lo necesitemos, un contable que nos guarda el dinero que vayamos consiguiendo, y un armero que nos proporciona todo tipo de suministros en cualquier lugar de la ciudad. También podremos sobornar a la policía, cortar las lineas telefónicas o pedir ayuda a un grupo de sicarios.

   El desarrollo de la historia está muy bien llevado en forma de fragmentos de película donde van narrando los acontecimientos que vivimos en el juego como si de un documental sobre nuestras vivencias se tratase. La historia de como Lincoln Clay acabó con Sal Marcano.

   El juego puede resultar un poco largo porque peca de repetitivo. Las misiones de la historia principal son todas muy parecidas. En cada barrio los negocios criminales son distintos, pero la manera de hacernos con su control es siempre muy similar. Las misiones secundarias tampoco es que aporten nada diferente. Sin embargo, si tenemos la posibilidad de participar en carreras de coches, lo cual se agradece para variar un poco.

   La ambientación de la ciudad sureña y la música de la época merecen un reconocimiento especial. Muy notable.

Gráficos: 9
Música: 9
Jugabilidad: 7
Argumento: 6

DIARIO DE UN PAPA PRIMERIZO: La matrona

   El martes 27 de Junio tuvimos nuestra primera visita a la matrona. La primera impresión fue de sorpresa. Yo me esperaba la típica señora mayor, curtida por los años, de apariencia similar a la señora Doubfire. Sin embargo, se trataba de una chica joven, rondando los 30, con una camiseta del grupo Kiss bajo la bata blanca. Vamos, que lo mismo te asiste en un parto, que te toca la batería en un grupo de rock. Acompañándola había otra chica aun más joven que suponemos debía de ser la practicante (o la bajista del grupo).

   Al principio estábamos un poco tensos porque era la primera vez que acudíamos a este tipo de consultas y lógicamente no sabes de que va el tema. Pero para ellas se veía que era un día más en la oficina, y eso relajó el ambiente.

   Como la misma matrona nos dijo, esta primera visita fue más informativa que otra cosa. Nos preguntó una serie de cuestiones de salud para cumplimentar nuestra ficha. Si la futura mamá fumaba o bebía, y antecedentes familiares de enfermedades. Por suerte en nuestras familias, a parte de que la mayoría no estamos muy bien de la cabeza, no hay nada de lo que preocuparse.

   También nos dio un calendario con las siguientes visitas que tendremos que hacer. Por delante tenemos: una analítica en la semana 10, la ecografía en la semana 12, visita al tocólogo en la semana 14, y de vuelta a la matrona el 27 de septiembre. Para le ecografía hay que llevar unos documentos firmados consintiendo que hagan una sería de pruebas para detectar cualquier problema y para visitar al tocólogo y la otra visita con la matrona tenemos que comprar unos frascos en la farmacia para llevarles unas muestras de orina (lo que yo llamo el control antidoping).

   Finalizadas las formalidades, la matrona nos dio un librito guía para embarazo, parto y lactancia. Es una especie de manual de instrucciones de lo que se nos viene encima. También nos dijo como debemos llevar la alimentación a partir de ahora, que se resume en comer muy sano y no beber alcohol.

   Respecto a los medicamentos, nada de nada. Así que a cuidarnos al máximo porque no se puede tratar ni un catarro. Si enfermamos tendremos que ir a un chamán a que nos cure con magia.

   Ya para terminar le hicimos alguna pregunta sobre dudas que teníamos apuntadas en una lista, y nos dieron un número de teléfono por si queremos contactar con ella. Al final la chica resultó muy agradable. Volveremos a verla en septiembre.

DIARIO DE UN PAPA PRIMERIZO: El Alcohol

   26 de Junio de 2017.

   Uno de los primeros problemas que conlleva la noticia del embarazo es la urgente necesidad de cambiar algunos hábitos. En nuestro caso, el consumo de bebidas alcohólicas supuso el primer problema. Que no se me malinterprete, no es que seamos unos borrachos, pero en nuestra vida social nos encanta salir a tomar unas copas de vino, o sidra, y de vez en cuando tomar una botella de vino en casa mientras vemos una película. Pues durante los próximos 9 meses eso tiene que cambiar.

   En estos momentos estamos en un proceso de búsqueda de bebidas alternativas, y parece más complicado que encontrar la Atlantida. Esta semana hemos probado cerveza sin alcohol, cerveza sin alcohol con limón, Nestea, tónica, mosto, licor de manzana sin alcohol, smoothie de frutas, vino sin alcohol frisante, vino sin alcohol tinto, y por supuesto agua. Por desgracia, o son muy dulces, o tienen demasiado gas, o empachan enseguida. Además, los vinos 0,0 son unos auténticos desconocidos y no se encuentran en los bares. En el supermercado Más y Más pregunté y me mandaron a por mosto. Por suerte encontré un par de botellas en el Alcampo. Habrá que seguir investigando. 

   En mi caso, que si puedo seguir bebiendo alcohol, no supone ningún sacrificio pero tiene sus inconvenientes. Las botellas de sidra se hacen más largas que un día sin pan, y tomar una botella de vino por mi cuenta no es factible ni viendo "Lo que el viento se llevó". En estas circunstancias resulta fundamental la bomba para hacerle el vacío a las botellas y así poder conservar el vino en buen estado durante varios días.

   Entre nuestros planes para que todo esto sea más llevadero está el sustituir nuestra costumbre de salir a picar algo de bar en bar por sentarnos a cenar en un sitio fijo, de esa manera con una consumición o dos ya alargamos la noche. Aquí el peligro está en que yo engorde tanto como mi mujer. Otra alternativa que estamos barajando es empezar a ir mucho más al cine, que nos gusta y de momento no tienen barra. Ya iremos viendo que más cosas se nos ocurren. 

CHEF RODRÍGUEZ: Boquerones en vinagre

   Ingredientes:

-Bocartes (Boquerón)
-Vinagre
-Ajo
-Guindilla cayena
-Perejil
-Aceite de Oliva
-Sal

   Lavamos bien los bocartes bajo el grifo quitando la espina central. A mi me gusta dejarlos en el congelador unos días para evitar cualquier problema con anisakis.
   Una vez descongelados, los metemos durante 1 hora en vinagre de vino. Transcurrido ese tiempo los sacamos del vinagre y aliñamos con ajo picado en abundancia, guindilla cayena al gusto, perejil y sal. Para terminar los cubrimos de aceite de oliva.
   Están buenísimos, y mientras que los tengamos entre aceite aguantarán varios días.

DIARIO DE UN PAPA PRIMERIZO: La noticia

   La vida puede cambiar en cuestión de segundos, y aunque haya cambios que sean planificados, uno no se da cuenta de la verdadera dimensión que tienen hasta que te los encuentras de frente una mañana de domingo al volver a casa después de pasar la noche celebrando la despedida de soltero de un buen amigo. Había sido una noche tranquila de parrillada en casa de mis abuelos, jugando al FIFA y al Risk, hablando entre colegas de tonterías y de cosas serias. A esas horas ya todo había cambiado, solamente que yo aún no lo sabía.
   Este cambio en mi vida tenia forma de dos pequeñas rayitas en un test de embarazo. Las grandes noticias no necesitan mucho espacio. Era domingo 18 de Junio de 2017, hacía un día precioso, y mi mujer me esperaba al salir de la ducha sujetando en su mano el aparatito blanco. Nos abrazamos, y entre todos los sentimientos que se arremolinaban en mi interior sentí sobre todo dos cosas: alegría y orgullo.